Fuente: OMI
Se está impartiendo formación sobre preparación ante derrames de hidrocarburos en un cursillo nacional en Belmopán, Belice, del 12 al 15 de marzo, para ayudar a crear capacidad en el gobierno de Belice para hacer frente a cualquier posible suceso de derrame de hidrocarburos.
El cursillo ha reunido a 48 participantes para debatir las repercusiones de la contaminación por hidrocarburos y sus efectos en el medio marino, la necesidad de una toma de decisiones rápida y la interfaz entre los grupos/agencias nacionales con otros países y la comunidad internacional.
A través de una serie de conferencias y estudios de casos, se tratarán temas clave que incluyen:
- una visión general de las estrategias y técnicas de respuesta
- destino y efecto de los hidrocarburos derramados en el medio marino
- gestión y estructuras de respuesta
- funciones y responsabilidades
- cooperación internacional
- reglas y convenios
- responsabilidad e indemnización
Los participantes pueden adquirir una idea clara de las funciones y responsabilidades que deben asumirse antes y durante un derrame de hidrocarburos, así como de las posibles estrategias para llevar a cabo una operación de limpieza eficaz, eficiente y segura. En el cursillo se hace hincapié en la colaboración eficaz entre numerosas partes interesadas, y se ofrece a los participantes la oportunidad de crear sus redes y fomentar un enfoque cooperativo de la preparación y respuesta ante los derrames de hidrocarburos.
La actividad está siendo impartida por un equipo del Centro regional de información y formación sobre la contaminación del mar en casos de emergencia para la región del Gran Caribe (RAC/REMPEITC-Caribe) y un experto internacional, a través del Programa integrado de cooperación técnica (PICT) de la OMI, en colaboración con el Departamento del medio ambiente de Belice y la autoridad portuaria de Belice.
Más información sobre RAC/REMPEITC-Caribe:
El Centro ayuda a los países a implantar los convenios internacionales destinados a reducir la contaminación procedente de los buques. Su anfitrión es el Gobierno de Curasao y participa en actividades financiadas en gran medida por la OMI, el PNUMA y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
