Fuente: MICI
Desde el 23 hasta el 27 de septiembre, Panamá es el país anfitrión de la Plenaria 43ª del Comité Técnico ISO/TC8 Buques y Tecnología Marítima, en la que miembros de diversos países colaboran para desarrollar normas que aseguren la calidad, seguridad y sostenibilidad en el ámbito marítimo, con la participación de representantes de naciones como China, Chipre, Dinamarca, Alemania, Grecia, Japón, Corea del Sur, Noruega, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos.
La ISO/TC8 se encarga de la estandarización en el sector de barcos y tecnología marina. Este sector abarca el transporte marítimo y la construcción naval internacional, e incluye a constructores navales, reparadores de buques, propietarios y operadores de embarcaciones, así como proveedores marítimos y organismos reguladores como la OMI.
El ministro encargado del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI), Carlos Hoyos Boyd, destacó que Panamá ha sido miembro de la Organización Internacional de Normalización (ISO) durante más de 25 años y este año celebra 10 años como miembro pleno del Comité Técnico ISO/TC8. Además, subrayó que la ubicación estratégica de Panamá, como puente entre los océanos Atlántico y Pacífico, y su emblemático Canal, han desempeñado un papel fundamental en el comercio marítimo internacional.
“Nuestra participación en este comité reafirma nuestro compromiso con la excelencia, la innovación y la cooperación en el sector marítimo. Hoy, al reunirnos aquí, compartimos un objetivo común: establecer y promover normas que garanticen la seguridad, la eficiencia y la sostenibilidad en nuestra industria; cada uno de ustedes es un protagonista en este proceso, y su experiencia y conocimientos son invaluables para el futuro del transporte marítimo agregó, el ministro encargado”.
Por su parte, Maybe Paulette Armes, punto focal ISO a nivel nacional de la Dirección General de Normas y Tecnología Industrial del MICI, destacó que el comercio marítimo representa aproximadamente el 90% del volumen del comercio mundial, desempeñando un papel crucial en la economía global. En este contexto, subrayó la relevancia de las normas desarrolladas por la ISO/TC8, que facilitan su adopción a nivel nacional, minimizando así las barreras comerciales y fomentando la innovación técnica en beneficio de la seguridad, el bienestar y la economía internacional.