La industria marítima enfrenta el complejo desafío de descarbonizar sus operaciones para 2050, lo que implica una migración a combustibles de bajas emisiones y una profunda transformación de toda la cadena de suministro. Este reto fue el foco de un conversatorio en Panamá, donde expertos destacaron el potencial de Latinoamérica en materias primas para combustibles verdes y la necesidad de infraestructura y capacitación.
El embajador de EE. UU. en Panamá, Kevin Marino Cabrera, visitó la planta de AES Colón, la mayor inversión estadounidense en el país y reconocida con el Premio a la Excelencia Corporativa. Esta planta de GNL, valorada en $1,150 millones, impulsa la transición energética limpia en Panamá y Centroamérica, destacando el compromiso de AES con la sostenibilidad y la responsabilidad social.