Fuente: CCIAP

Las fiestas de fin de año nos invitan a hacer una pausa necesaria. Son días para reflexionar sobre lo vivido, valorar lo aprendido y mirar hacia adelante con esperanza, pero también con responsabilidad. Este cierre de año nos deja un mensaje claro: Panamá enfrenta desafíos, sí, pero también cuenta con las herramientas para superarlos.

Porque Panamá lo tiene Todo. Lo tiene todo en su gente: trabajadores comprometidos, emprendedores que apuestan por el país y empresas que, incluso en contextos complejos, siguen generando oportunidades. Esa fortaleza humana ha sido, y seguirá siendo, el mayor activo de nuestra nación.

Desde la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá hemos mantenido una convicción firme a lo largo de este año: estamos obsesionados con el empleo. El empleo es la base del bienestar social, de la estabilidad de las familias y del desarrollo sostenible del país. No se trata solo de cifras; se trata de oportunidades reales para que cada panameño pueda salir adelante con dignidad.

Sin embargo, el empleo no existe en el vacío. Para que haya más y mejores oportunidades, necesitamos educación de calidad y una formación alineada a las necesidades del país. Un sistema educativo que prepare a nuestros jóvenes para el trabajo, que fortalezca las habilidades técnicas y profesionales, y que permita a las personas adaptarse a un mundo en constante cambio. Educación y empleo deben caminar juntos si aspiramos a un desarrollo inclusivo y duradero.

A lo largo de este año, hemos reiterado la importancia del diálogo, de la colaboración y de la búsqueda de consensos. Panamá avanza cuando pone el interés nacional por encima de las diferencias y cuando entiende que el desarrollo es una construcción colectiva. Gobierno, sector privado, trabajadores y sociedad tenemos un rol que cumplir.

Las fiestas nos recuerdan valores esenciales: la unión, la solidaridad y el compromiso con los demás. Son valores que también deben guiar nuestras decisiones como país. El futuro que queremos no se construye con atajos, sino con trabajo constante, educación pertinente y oportunidades para todos.

Desde la Cámara, renovamos nuestro compromiso de seguir impulsando la empresa responsable, promoviendo el empleo formal y apoyando una educación que sea motor de desarrollo. Creemos en Panamá, en su gente y en su capacidad de crecer con equidad. Que estas fiestas traigan paz a los hogares panameños y que el año que comienza nos encuentre unidos, trabajando juntos por un país con más oportunidades. Porque Panamá lo tiene Todo, y lo mejor aún está por construirse.